Informe de muestra
El cobre ha adquirido los apodos de “Dr. Cobre” y “metal con un doctorado en economía” debido a su asombrosa capacidad para diagnosticar la salud de la economía en general. Esto se debe en gran parte a que el cobre tiene multitud de usos industriales -incluidos el cableado eléctrico, los tejados, la fontanería y la maquinaria industrial- y a que su oferta es relativamente estable, lo que significa que los precios están estrechamente correlacionados con la demanda.
Los economistas y los inversores siguen de cerca el precio de la materia prima para inferir cómo va la economía y habrán estado en vilo cuando los precios del cobre se hundieron a mínimos de más de dos años a finales de septiembre en medio de una mayor preocupación por la economía china, que consume alrededor de la mitad del cobre mundial, en medio de las actuales tensiones comerciales con Estados Unidos. A pesar de recuperarse un poco tras las interrupciones del suministro en Chile y el optimismo relacionado con el acuerdo comercial de la “fase uno”, los precios del cobre cotizaron a 5.827 USD por tonelada métrica el 1 de noviembre, lo que seguía siendo un descenso del 2,1% en lo que va de año y del 4,5% con respecto al mismo día de 2018.
Si observamos nuestras previsiones para el próximo año, Dr Copper indica que una recesión mundial no parece estar a la vuelta de la esquina. Nuestro Consensus Forecast proyecta que el cobre alcanzará una media de 6.288 USD por tonelada métrica en el cuarto trimestre de 2020, cómodamente por encima de la marca simbólica de 6.000 USD por tonelada métrica. Al mismo tiempo, los patrones de negociación en la Bolsa de Metales de Chicago y la Bolsa de Metales de Londres parecen sugerir que los fondos están empezando a volverse más alcistas con respecto al cobre.
No obstante, como muestra el gráfico anterior, la diferencia entre las previsiones de nuestros panelistas es significativa: La previsión mínima para el cuarto trimestre de 2020 es de 5.182 USD por tonelada métrica, mientras que la previsión máxima es de 7.000 USD por tonelada métrica. Además, muchos analistas sostienen que los precios del cobre deberían cotizar mucho más altos dadas las perspectivas de la oferta y la demanda.
En cuanto a la oferta, la incertidumbre ha aumentado debido a la tensa situación política en gran parte de América Latina, donde se localiza aproximadamente un tercio de la producción. BHP, por ejemplo, anunció el 29 de Octubre que su mina Escondida, la mayor del mundo, estaba operando a un “ritmo reducido” después de que sus empleados se unieran a las protestas antigubernamentales. Además, la oferta está por debajo de su capacidad debido a la falta de inversión a largo plazo.
Mientras tanto, las perspectivas de la demanda a largo plazo deberían ser halagüeñas, dado que necesitaremos mucho cobre si queremos lograr la descarbonización y la transición hacia un mundo más sostenible: Los coches eléctricos necesitan unas tres veces más cobre que los coches tradicionales y el metal también es actualmente decisivo en la producción de turbinas eólicas, paneles solares y otras fuentes de energía renovables.
Teniendo en cuenta lo anterior y los temores de una recesión mundial que se arremolinan, economistas e inversores seguirán muy atentos al diagnóstico del Dr. Cobre sobre la salud de la economía mundial.