Alemania: La economía registra la mayor contracción jamás registrada en el segundo trimestre
El PIB se contrajo a un fuerte ritmo del 9,7% en tasa intertrimestral desestacionalizada en el segundo trimestre (anteriormente: -10,1% intertrimestral anual), muy por debajo de la contracción del 2,0% registrada en el primer trimestre. La lectura del segundo trimestre fue la peor desde que se iniciaron los registros actuales en 1970, y significó que la economía entró en recesión por primera vez desde 2013. La desaceleración fue generalizada. El gasto de los hogares cayó un asombroso 10,9% en el segundo trimestre, por debajo de la contracción del 2,5% del primer trimestre, al dejarse sentir toda la fuerza de las medidas de contención promulgadas en marzo. La inversión fija también se contrajo a un ritmo más rápido del 7,9% en el segundo trimestre, frente a la contracción del 0,5% del primer trimestre. El consumo público, sin embargo, mejoró hasta una expansión del 1,5% en el 2T (1T: +0,6% intertrimestral).
En el ámbito exterior, las exportaciones de bienes y servicios cayeron un 20,3% trimestral desestacionalizado en el segundo trimestre, notablemente por debajo de la contracción del 3,3% del primer trimestre. Ello se debió a que los bloqueos y las medidas restrictivas en el extranjero lastraron la demanda de exportaciones. Además, las importaciones de bienes y servicios cayeron a un ritmo más pronunciado del 16,0% en el segundo trimestre (1er trimestre: -1,9% intertrimestral), reflejando el debilitamiento de la demanda interna debido a las medidas de contención del coronavirus.
En términos anuales, el PIB disminuyó un 11,3% en el segundo trimestre, tras la contracción del 1,8% del trimestre anterior.
De cara al futuro, se espera que la economía alemana salga de la recesión en el tercer trimestre. La actividad económica debería recuperarse en la segunda mitad del año debido a la relajación de las medidas restrictivas, como demuestran los datos disponibles para el tercer trimestre. Sin embargo, la balanza de riesgos está sesgada a la baja, ya que el número de nuevos casos de coronavirus ha aumentado en las últimas semanas, lo que podría dar lugar a medidas más estrictas que descarrilen la recuperación. Además, el esperado repunte de la actividad en el segundo semestre no podrá evitar que la economía se contraiga este año al ritmo más pronunciado en muchas décadas.
Carsten Brzeski, economista jefe para la zona euro de ING, añadió: “La contracción de la economía fue algo más leve que en la primera estimación, lo que ilustra lo difícil que resulta actualmente captar las oscilaciones impulsadas por el cierre de cualquier economía con los modelos macro tradicionales. […] De cara al futuro, no hace falta ser un genio para predecir que la economía tendrá uno de sus mejores resultados trimestrales en el tercer trimestre. […] Al mismo tiempo, sin embargo, el impacto estructural de la crisis también está aflorando, limitando demasiado el entusiasmo por el crecimiento.”