Australia: La inflación desciende en septiembre a su nivel más bajo en más de tres años
La inflación cayó al 2,1% en septiembre desde el 2,7% de agosto, acercándose al límite inferior de la banda objetivo del 2,0-3,0% del Banco de la Reserva de Australia (RBA). La cifra de septiembre marcó la tasa de inflación más baja desde julio de 2021 y sorprendió a los mercados a la baja. La moderación fue generalizada, encabezada por un descenso más pronunciado de los precios de las comunicaciones y el transporte. En consecuencia, la tendencia apuntó a la baja, con una inflación media anual que cayó al 3,5% en septiembre (agosto: 3,8%). El resultado de agosto marcó la lectura más débil desde marzo de 2022. Por su parte, la inflación excluidos los artículos volátiles y los viajes de vacaciones bajó al 2,7% desde el 3,0% de agosto. Por último, los precios de consumo cayeron un 0,16% intermensual, cifra superior al descenso del 0,08% de agosto.
Tras un esperado repunte en el cuarto trimestre, se prevé que la inflación reanude una tendencia a la baja en 2025: Las presiones sobre los precios volverán al rango objetivo del RBA el próximo año, atemperadas por una política monetaria restrictiva y un elevado efecto base. Dicho esto, una actividad económica más fuerte limitará la ralentización. La aceleración del crecimiento salarial y un dólar australiano más débil de lo previsto son riesgos al alza.
Sue Ann Lee, de UOB, comentó las implicaciones para el giro del RBA: “En general, las últimas cifras de inflación son sin duda un alivio para el Banco de la Reserva de Australia (RBA). Dicho esto, la última serie de cifras de inflación sigue a un informe extremadamente fuerte del mercado laboral a principios de este mes. [Aunque el 4T24 sigue siendo una posibilidad, ahora estamos retrasando nuestra primera previsión de recorte de tipos hasta diciembre. Hay señales alentadoras sobre el crecimiento de los salarios y las vacantes de alquiler que atenúan los riesgos al alza de las perspectivas de inflación, pero esperamos que el RBA quiera más pruebas y espere a que las presiones sobre los precios se disipen antes de actuar.”David Seif y Andrew Ticehurst, analistas de Nomura, se mostraron más agresivos: “En general, creemos que los datos del IPC de septiembre y del tercer trimestre indican nuevos y satisfactorios avances en la lucha por volver a controlar la inflación. […] Pero también parece claro que aún no hemos llegado a ese punto”. El IPC general se vio arrastrado a la baja por la bajada (volátil) de los precios del combustible y por las subvenciones temporales de la Commonwealth y de los gobiernos estatales a los consumidores, y la inflación de los servicios se mantuvo incómodamente estancada. […] En conjunto, pensamos que el RBA sigue en camino de quedarse rezagado con respecto a otros bancos centrales y no aplicar una primera política de relajación hasta febrero.”