Colombia: BanRep reduce el tipo de interés oficial a un nuevo mínimo histórico
El 30 de junio, el Banco Central de Colombia (BanRep) decidió recortar el tipo de interés de referencia en 25 puntos básicos, hasta un nuevo mínimo histórico del 2,50%. Se trata del cuarto recorte consecutivo del Banco, que intenta apoyar la economía en medio de una probable recesión profunda debida a la pandemia de Covid-19 y a los bajos precios del petróleo. Sin embargo, el ritmo de relajación se redujo a 25 puntos básicos, frente a los tres recortes anteriores de 50 puntos básicos. Además, la decisión no fue unánime, ya que dos miembros del Consejo votaron a favor de un recorte mayor.
La caída de la inflación y un panorama económico sombrío impulsaron la decisión del BanRep de recortar de nuevo los tipos en junio. En su declaración adjunta, el Banco declaró que las expectativas de inflación siguieron cayendo en mayo y se mantienen por debajo del objetivo del Banco del 3% debido al débil panorama económico. Además, el Banco declaró que el mercado laboral parece haberse deteriorado notablemente en comparación con hace un mes y que espera una lenta recuperación en los principales socios comerciales del país. Dicho esto, la preocupación por el peso y el efecto de que los tipos de interés reales se sitúen en territorio negativo probablemente hicieron que el Banco se abstuviera de recortar el tipo en 50 puntos básicos más.
La próxima reunión se celebrará el 31 de julio.
De cara al futuro, el breve comunicado del Banco carecía en gran medida de orientaciones futuras; sin embargo, la mayoría de nuestros panelistas consideran que el Banco recortará modestamente el tipo de interés oficial para apoyar a la maltrecha economía.
Comentando las previsiones de Credicorp, el director de investigación Daniel Velandia y el analista Camilo Durán añaden: “Seguimos esperando que el tipo repo terminal del ciclo en curso se sitúe en el 2,25% tras un recorte de 25 pb […], aunque existen riesgos considerables de que el tipo repo alcance el 2,0% o el 1,75% este año. En nuestra opinión, esto último dependerá más del comportamiento del crédito local (en términos de toda la oferta, la demanda y los tipos) y de los mercados financieros, que de la dinámica a corto plazo de la inflación y la actividad. En concreto, el Consejo sigue siendo escéptico sobre el efecto real que una fuerte relajación monetaria podría tener en la economía en las condiciones actuales, que implican una débil demanda de dinero, principalmente por parte de los agentes económicos privados.”