Egipto: La inflación siguió desacelerándose en julio
La inflación disminuyó por quinto mes consecutivo en julio, situándose en el 25,7%, frente al 27,5% de junio. La lectura de julio representó la tasa de inflación más débil desde diciembre de 2022. En cuanto a los detalles de la publicación, la moderación se debió principalmente a un aumento más suave de los precios de los alimentos y las bebidas no alcohólicas, el mayor componente de la cesta del índice de precios de consumo. En consecuencia, la tendencia apuntó a la baja, con una inflación media anual que se situó en el 32,3% en julio (junio: 33,3%). Por su parte, la inflación subyacente bajó al 25,0% en julio, frente al 26,6% del mes anterior. Por último, los precios de consumo subieron un 0,41% respecto al mes anterior en julio, por debajo de la subida del 1,56% de junio.
Nuestros panelistas esperan que la inflación media del segundo semestre del año natural 2024 sea inferior a la del primer semestre. Sin embargo, persisten los riesgos al alza: Es probable que en el futuro se produzcan nuevas oleadas de recortes de subvenciones -como la subida del 300% del precio subvencionado del pan el 1 de junio, el aumento del 15% de una serie de combustibles y el incremento de hasta el 40% de las tarifas de la electricidad residencial a partir del 1 de septiembre- en el marco de un acuerdo de rescate con el FMI, lo que ejercerá presiones al alza. En conjunto, en el año civil 2024 la inflación sólo se ralentizará ligeramente con respecto al año civil anterior. Se espera que la inflación se mantenga por encima del límite superior de la banda fijada como objetivo por el Banco Central de Egipto (BCE) (5,0-9,0%) hasta 2027. Si el BCE -como afirma que desea hacer- reduce el límite superior de esta banda al 7,0% en 2025, la inflación se mantendrá por encima del objetivo más allá de 2027.