Eslovaquia: El crecimiento económico se ralentiza en el tercer trimestre, su nivel más bajo en 18 meses
Una segunda publicación confirmó que el crecimiento anual del PIB se desaceleró al 1,2% en el tercer trimestre (2T: +2,0% interanual), lo que supone el resultado más débil desde el 1T 2023. En términos intertrimestrales desestacionalizados, el crecimiento económico se aceleró hasta el 0,3% en el tercer trimestre, frente al 0,2% del periodo anterior.
Si nos fijamos en los detalles de la publicación, el descenso anual fue generalizado, con todos los subcomponentes del gasto del PIB registrando lecturas más débiles.
A nivel nacional, el crecimiento del gasto de los hogares cayó al 1,5% en el tercer trimestre (2T: +2,5% interanual), el resultado más débil desde el cuarto trimestre de 2023. Además, el crecimiento del consumo público se enfrió al 0,9% (2T: +5,6% interanual). Por otra parte, la inversión fija se contrajo un 8,0% en el tercer trimestre (2T: +4,4% interanual), arrastrada por una elevada base de comparación, registrando el primer descenso en dos años.
En el frente exterior, las exportaciones de bienes y servicios se contrajeron un 0,2% anual en el 3T, en contraste con la expansión del 3,6% del segundo trimestre. Por su parte, las importaciones de bienes y servicios se deterioraron, contrayéndose un 0,3% en el tercer trimestre (+7,0% interanual en el segundo).
En el cuarto trimestre, nuestros panelistas prevén un fortalecimiento del crecimiento del PIB. De cara a 2025, nuestro consenso es que la economía crezca a un ritmo similar al previsto para 2024. La recuperación de la inversión en capital fijo, respaldada por la bajada de los tipos de interés y los fondos de la UE, junto con el aumento de las exportaciones impulsado por la mayor demanda de la UE, compensarán el menor crecimiento del gasto público y privado.
Comentando la lectura, Matej Hornak, analista de Erste Bank, declaró: «Se espera que las medidas de aumento de costes para las empresas, derivadas de los esfuerzos de consolidación anunciados por el Gobierno hace unas semanas, afecten negativamente a la actividad inversora y al crecimiento del PIB en los próximos años. Debido a estos esfuerzos de consolidación, el PIB podría debilitarse medio punto porcentual en cada uno de los dos próximos años, ya que la reducción del consumo y de la actividad inversora podría frenar el crecimiento a más largo plazo. La presión sobre los presupuestos empresariales también afectará a la capacidad de aumentar los salarios, aunque un mercado laboral relativamente ajustado seguirá favoreciendo a los empleados.»