Israel: El PIB registra la mayor caída de su historia en el primer trimestre
El PIB cayó un 7,1% en el primer trimestre, en contraste con la expansión del 4,6% registrada en el cuarto trimestre, en medio de paros nacionales e internacionales. En términos anuales, el crecimiento económico se redujo al 0,4% en el primer trimestre, frente al aumento del 3,8% del cuarto. El consumo privado cayó un 20,3% (4T: +10,4% trimestral sostenido), debido a las menores compras de bienes duraderos y no duraderos. La inversión fija se contrajo un 17,3% (4T: +7,3% trimestral a/a), debido a una menor inversión en vivienda e industrial, mientras que el consumo público se redujo un 10,3% (4T: +0,1% trimestral a/a), probablemente debido en parte a la falta de presupuesto para 2020, que llevó a una congelación del gasto. En el frente exterior, las exportaciones cayeron un 5,9% (4T: +6,8% trimestral a/a), mientras que las importaciones se desplomaron un 27,5% (4T: +11,3% trimestral a/a).
La economía se ve sumida este año en una profunda recesión, con el turismo y las exportaciones de servicios de alta tecnología especialmente afectados por los cierres en el extranjero. Sin embargo, el estímulo fiscal y la reapertura de la economía nacional a partir de mediados de abril deberían apoyar la actividad.
Además, las perspectivas a medio plazo siguen siendo optimistas. Como comenta Padmasai Varanasi, economista de Oxford Economics: “A medio plazo, la economía debería beneficiarse de una política monetaria acomodaticia y de la evolución del sector del gas […] un robusto sector de servicios y una fuerte demanda de consumo deberían apuntalar el crecimiento, al tiempo que compensarían parcialmente la posible ralentización del crecimiento de las exportaciones y las tensiones políticas regionales.”