Japón: La inflación subyacente se mantiene estable en mayo
Los precios de consumo subyacentes -que excluyen los alimentos frescos- aumentaron un 0,20% en mayo respecto al mes anterior, reflejando la lectura de abril. La inflación interanual subyacente se mantuvo en el 2,1% de abril en mayo, el nivel más alto desde 2015. Mientras tanto, la tendencia apuntó ligeramente al alza, con una inflación media anual del 0,5% en mayo (abril: 0,3%). Por último, la inflación de los precios al consumo también se mantuvo estable, situándose en el 2,5% en abril, también el nivel más alto desde 2015.
El tibio crecimiento intermensual de la inflación subyacente apunta a una continua falta de inflación impulsada por la demanda. En consecuencia, las perspectivas de que se produzcan efectos de segunda ronda -en los que los precios más altos empujan al alza los salarios, lo que hace aumentar aún más los precios en un círculo vicioso- y, por tanto, un aumento sostenido de la inflación por encima del objetivo del 2,0% del Banco de Japón, siguen siendo poco probables. Los analistas de EIU comentaron las perspectivas: “Mantenemos nuestra previsión de que los precios al consumo aumentarán una media del 2,2% en 2022, antes de moderarse a un crecimiento del 0,5% en 2023 a medida que disminuyan factores externos como el aumento de los precios de las materias primas. El Banco de Japón mantendrá los tipos de interés negativos y la relajación cuantitativa para facilitar el crecimiento económico. Sin embargo, es posible que el banco central ajuste su configuración de control de la curva de rendimientos permitiendo una banda de movimiento más amplia para los rendimientos de la deuda pública japonesa a 10 años, desde los 0,25 puntos porcentuales actuales, con el fin de reducir la presión depreciatoria sobre el yen.”