Japón: El Banco de Japón mantiene estable su política monetaria en la reunión de junio y presenta medidas contra el cambio climático
En su reunión del 18 de junio, el Banco de Japón mantuvo sin cambios todos los parámetros de su política monetaria, tal y como esperaban los analistas del mercado. En cuanto a los tipos, el Banco de Japón mantuvo sin cambios el tipo de interés oficial a corto plazo para las cuentas corrientes de las instituciones financieras en el Banco, en menos 0,10%. Asimismo, siguió sin fijar un límite máximo para la cantidad de deuda pública japonesa (JGB) que comprará, con el fin de mantener el rendimiento de la JGB a 10 años en torno al 0,00%. En cuanto a las compras de activos, el Banco mantuvo sin cambios sus compromisos de compra, incluidos los de fondos cotizados, fondos de inversión inmobiliaria japoneses, papel corporativo y bonos corporativos.
Estas decisiones se adoptaron en un contexto de moderadas presiones sobre los precios y frágil recuperación económica. El Banco describió la economía como todavía en una “situación grave” debido a los efectos de la pandemia del Covid-19. Por ello, ante la posibilidad de que un tercer estado de emergencia haya frenado la actividad económica durante abril-junio, el Banco de Japón consideró que tenía motivos para adoptar una postura de espera. Por otra parte, el Banco decidió prorrogar por tercera vez su apoyo financiero especial relacionado con Covid-19. El programa expiraba a finales de septiembre, pero ahora se prolongará seis meses más, hasta finales de marzo de 2022. Alejándose de su marco político habitual, el BoJ anunció su intención de introducir medidas que proporcionarán financiación a las instituciones financieras que traten de abordar los problemas derivados del cambio climático. La nueva iniciativa se hace eco de las medidas adoptadas por el Banco de Inglaterra el mes pasado, que imponen a los bancos del Reino Unido una mayor responsabilidad a la hora de examinar el impacto de sus acciones financieras sobre el calentamiento global, y llega en un momento en que el Primer Ministro Suga ha fijado el objetivo de que Japón alcance las emisiones netas cero en 2050. En la reunión de política monetaria de julio se anunciarán más detalles.
De cara al futuro, el Banco de Japón reiteró su tono moderado en su comunicado, en el que seguía afirmando que “vigilará de cerca el impacto de Covid-19 y no dudará en adoptar medidas de relajación adicionales si fuera necesario”, al tiempo que “espera que los tipos de interés a corto y largo plazo se mantengan en sus niveles actuales o más bajos”.
En cuanto a las futuras medidas políticas, Alvin Liew, economista jefe de United Overseas Bank, comentó: “La inacción política de hoy estuvo en consonancia con las expectativas del mercado y refuerza la opinión de que el Banco de Japón no endurecerá su política monetaria a corto plazo y mantendrá su estímulo masivo en los próximos años, posiblemente al menos hasta el año fiscal 2023. También mantenemos nuestra opinión de que el Banco de Japón hará más y mejorará aún más su política de relajación monetaria y también somos conscientes de que las expectativas del mercado se inclinan ahora a que el Banco de Japón ha alcanzado los límites de su política monetaria y se mantendrá en un patrón de mantenimiento de la política hasta al menos abril de 2023, cuando está previsto que el gobernador Kuroda deje el Banco de Japón” La próxima reunión de política monetaria finalizará el 16 de julio.