Kazajstán: El Banco Central endurece su postura en noviembre
En su última reunión de 2024, celebrada el 29 de noviembre, el Banco Nacional de Kazajstán decidió subir el tipo básico 100 puntos básicos, hasta el 15,25%, y mantener la banda de tipos de interés en más o menos 1 punto porcentual. La subida fue la primera desde 2022 y se produjo tras dos subidas consecutivas y una reducción acumulada de 2,5 puntos porcentuales desde agosto de 2023. La decisión sorprendió a los mercados, que habían previsto que el NBK se mantuviera firme.
El Banco determinó que era necesaria una política monetaria más restrictiva para impulsar la inflación hacia su objetivo a medio plazo del 5,0%. La inflación se ha mostrado inflexible hasta ahora en el segundo semestre de 2024, manteniéndose por encima del objetivo hasta octubre, donde el Banco espera que permanezca al menos hasta 2027; el Banco elevó su previsión de inflación para finales de 2025 en 1,0 puntos porcentuales, hasta el 6,5-8,5%. El BNK señaló los crecientes riesgos inflacionistas derivados de la fuerte demanda interna, el aumento de las tarifas de los servicios públicos y el actual estímulo fiscal debido a la escasez de ingresos presupuestarios. La acusada debilidad del tenge también aumentará las presiones sobre los precios de importación. Por lo que respecta a la actividad económica, el Banco rebajó su previsión de crecimiento del PIB para 2025 en 0,5 puntos porcentuales, hasta el 4,5-5,5%.
En su comunicado, el NBK adoptó un tono duro, indicando que “vigilará de cerca la necesidad de un endurecimiento adicional de la política monetaria” para anclar la tendencia a la baja de la inflación hacia su objetivo. El Banco admitió que los riesgos inflacionistas al alza se habían intensificado desde su última reunión, como consecuencia de la depreciación de la moneda, el aumento de las expectativas de inflación y el estímulo fiscal. Dada la inesperada subida, nuestros panelistas están actualizando sus previsiones. El Banco anunciará su próxima decisión de política monetaria el 17 de enero.
Basak Edizgil y Clemens Grafe, de Goldman Sachs, comentaron: “Creemos que la subida fue una respuesta puntual a la reciente debilidad del tipo de cambio. Sin embargo, las recientes enmiendas presupuestarias (que aumentaron significativamente las transferencias del fondo nacional del petróleo tanto para 2024 como para 2025) también incrementan los riesgos de inflación a medio plazo impulsados por la demanda. De ahí que el riesgo para nuestra previsión de recortes de -100 puntos básicos en 2025 sea al alza por una mayor aceleración de las presiones inflacionistas internas y externas.”