Países Bajos: La economía se contrae al mayor ritmo registrado en el segundo trimestre
La segunda lectura de los datos de la contabilidad nacional confirmó los pésimos resultados de la economía neerlandesa en el segundo trimestre, con una caída intertrimestral récord del PIB del 8,5% en términos desestacionalizados (T1: -1,5% intertrimestral a/a), que sumió a la economía en su primera recesión desde el segundo semestre de 2012. En términos anuales, la economía neerlandesa se contrajo un 9,4%, que es también la caída más pronunciada registrada y significativamente mayor que el descenso del 0,2% del primer trimestre. La pandemia del virus Covid-19 y las medidas de contención relacionadas afectaron duramente a la demanda interna, y el gasto de los hogares pesó especialmente en la economía. El consumo privado cayó un asombroso 11,3% (1er trimestre: -2,6% intertrimestral), alcanzando un nuevo mínimo histórico, ya que las medidas restrictivas limitaron la capacidad de gasto de los consumidores. Por su parte, la inversión en capital fijo también se desplomó, con una contracción del 11,3% en el segundo trimestre (+0,6% intertrimestral en el primer trimestre), en un contexto de creciente incertidumbre económica. Por último, el consumo público cayó un 3,1% con respecto al trimestre anterior (1er trimestre: -1,5% intertrimestral). En el frente exterior, las exportaciones de bienes y servicios disminuyeron un 10,3% en el segundo trimestre, frente a la caída del 1,9% del primer trimestre, debido a las restricciones mundiales y al debilitamiento de los flujos comerciales, que suprimieron la demanda exterior. Por su parte, las importaciones disminuyeron un 9,5% en el segundo trimestre, frente a la caída del 2,0% del primer trimestre.
Este año, se prevé que la economía se contraiga al ritmo más pronunciado desde, al menos, la Segunda Guerra Mundial; sin embargo, el estímulo fiscal y el levantamiento de las restricciones deberían suavizar el golpe y ayudar un poco a la recuperación económica en el segundo semestre. Se prevé que el año próximo la economía repunte notablemente, pero ello se debe en parte a un efecto de base favorable. La balanza de riesgos sigue inclinada a la baja en medio de la persistente incertidumbre relacionada con el Brexit, mientras que la evolución de la economía alemana también tendrá una influencia clave en la economía neerlandesa.