Portugal: El Partido Socialista en el poder se asegura la mayoría en las elecciones anticipadas de enero, señal de estabilidad para el futuro.
El actual Primer Ministro, António Costa, sorprendió a los analistas al conseguir una amplia mayoría parlamentaria para su Partido Socialista (PS) de centro-izquierda en las elecciones anticipadas celebradas el 30 de enero. Las encuestas previas a las elecciones apuntaban a un empate técnico con su oponente, Rui Rio, del Partido Socialdemócrata (PSD), de centro-derecha, en el que ninguno de los dos partidos obtuvo la mayoría.
Las elecciones anticipadas fueron convocadas por el Presidente Marcelo Rebelo de Sousa cuando el Parlamento no aprobó el proyecto de presupuesto del PS para 2022, el 28 de octubre del año pasado. La propuesta, que aumentaría el número de tramos impositivos y reduciría el impuesto sobre la renta para algunos, contrasta con la opinión del PSD de que la economía debe impulsarse a través de la inversión, es decir, bajando los impuestos de sociedades. Ahora que el partido tiene mayoría, el presupuesto del PS debería aprobarse en cuanto se someta a votación en el Parlamento. Además, dada su mayoría en el Parlamento, el PS ya no tiene que depender de los votos de los partidos de extrema izquierda para aprobar los presupuestos, como ha tenido que hacer en los últimos seis años. Por tanto, aunque cabe esperar una amplia continuidad política, existe la posibilidad de que el Gobierno adopte un enfoque más favorable al mercado.
Este resultado afecta a la economía de dos maneras fundamentales. En primer lugar, la rapidez con la que se aprobará el presupuesto del PS significa que el impacto de la crisis política de octubre será mínimo en la gobernanza del país; el resultado esperado habría requerido probablemente extensas negociaciones presupuestarias. En segundo lugar, la expectativa de una legislatura estable de cuatro años disminuye la incertidumbre sobre el futuro económico del país. En cuanto a la economía, Holger Schmieding, economista de Berenberg, comentó: “Como Costa podrá aprobar ahora el presupuesto, Portugal podrá empezar a gastar 16.600 millones de euros de los fondos de recuperación de la UE. Según las estimaciones de la Comisión Europea, el plan de recuperación previsto por el Gobierno en minoría saliente de Costa elevaría el PIB de Portugal entre un 1,5% y un 2,4% de aquí a 2026. […] Gracias a las reformas del mercado laboral que redujeron las indemnizaciones por despido y descentralizaron las negociaciones de los contratos de trabajo, el desempleo descendió al 6,3% en noviembre de 2021 desde su máximo del 18,2% en enero de 2013. Pero los ingresos netos medios de los hogares portugueses siguen siendo de los más bajos de la eurozona. Costa quiere aumentar la renta por trabajador, pero seguirá salvaguardando la estabilidad fiscal de Portugal. Con políticas económicas en gran medida sensatas, Portugal puede mantenerse en una sólida senda de recuperación.”