Rusia: La actividad registra en el tercer trimestre su mayor expansión desde el cuarto trimestre de 2021
El crecimiento repuntó en el tercer trimestre, con un aumento anual del PIB del 5,5%, según una estimación preliminar (2T: +4,9% interanual). La lectura del tercer trimestre marcó el mejor resultado desde el cuarto trimestre de 2021.
Aunque el comunicado no incluía un desglose por subcomponentes, los datos mensuales disponibles sugieren que el repunte fue generalizado. Por el lado de la producción, la producción industrial, el comercio mayorista y minorista, la actividad de la construcción y la producción agrícola registraron un fuerte crecimiento en el tercer trimestre. Por el lado del gasto, el aumento de los salarios, el auge de las ventas al por menor y una tasa de desempleo en mínimos históricos apuntan a otro fuerte repunte de la demanda interna en el trimestre.
Un dato menos positivo es que las exportaciones de mercancías cayeron casi un tercio interanual en el tercer trimestre, lo que contrasta con el aumento de dos dígitos de las importaciones y apunta a un empeoramiento de los resultados del sector exterior. Esto se debió principalmente a las sanciones internacionales y a la disminución de las exportaciones de crudo y gas natural.
Al comentar las perspectivas económicas, los analistas de Goldman Sachs declararon: «Creemos que la relajación de la política fiscal es el principal motor de la significativa expansión económica […]. Tanto nosotros como el BCR consideramos que la economía rusa se encuentra por encima de su potencial, y esto, más que el rublo, es el principal motor de las fuertes presiones inflacionistas. […] Aunque esperamos que el crecimiento del PIB sólo se ralentice marginalmente hasta un +2,1% en 2024, por encima del consenso, y aún más hasta el +1,3% en 2025, esperamos que la estructura del crecimiento se reequilibre bruscamente. Es probable que las exportaciones se recuperen de algún modo tras la caída puntual de este año, pero creemos que el crecimiento de la demanda interna se ralentizará hacia la tasa del 2,0% que consideramos crecimiento tendencial», mientras que los analistas de EIU se mostraron más pesimistas: «Seguimos siendo escépticos sobre la exactitud de los datos comunicados por el Gobierno, especialmente dada su limitada disponibilidad. Nuestra hipótesis es que la economía rusa seguirá sometida a una fuerte presión a la baja durante todo el periodo de previsión como consecuencia de las sanciones occidentales. Esperamos que la economía crezca un todavía moderado 0,7% en 2024, tras un crecimiento estimado del 0,6% en 2023.»