Singapur: La MAS mantiene estable su política monetaria en abril
En su reunión del 14 de abril, la Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) mantuvo su política monetaria sin cambios en el nivel aplicado al inicio de la pandemia de Covid-19 en marzo de 2020. Como tal, la MAS mantuvo la tasa objetivo de apreciación anual de la banda de política del tipo de cambio efectivo nominal del dólar de Singapur (S$NEER) en cero por ciento, manteniendo efectivamente su postura monetaria laxa por segunda reunión consecutiva. Además, no se modificó la amplitud de la banda. El dólar de Singapur se gestiona frente a una cesta de divisas y la Autoridad Monetaria de Singapur aplica un régimen de flotación controlada, en el que la moneda fluctúa dentro de una banda de fluctuación cuyo nivel y dirección son decididos por la Autoridad con el fin de hacer frente a la volatilidad a corto plazo de los mercados de divisas y garantizar la estabilidad de precios a medio plazo. La Autoridad renuncia así a su capacidad de controlar los tipos de interés nacionales, que en su lugar vienen determinados en gran medida por los tipos de interés de los préstamos internacionales y las expectativas de los futuros movimientos del dólar de Singapur. La decisión, ampliamente esperada por los analistas del mercado, fue impulsada por las débiles perspectivas de los precios al consumo. La Autoridad espera que la inflación subyacente -la variable clave que sigue- se sitúe entre el 0,0% y el 1,0% este año, ya que la persistente brecha de producción negativa y la atonía del mercado laboral pesan sobre las presiones de los precios. No obstante, la Autoridad prevé que el crecimiento económico supere el límite superior del intervalo 4,0-6,0% previsto anteriormente, ya que el repunte de la demanda exterior impulsado por las vacunas impulsa el sector exterior. Por ello, la Autoridad consideró apropiado mantener su orientación acomodaticia.
En su comunicado, la Autoridad no indicó explícitamente la dirección futura de la política, pero comentó que “como se espera que la inflación subyacente se mantenga baja, la MAS evalúa que una política acomodaticia seguirá siendo apropiada durante algún tiempo”. De cara al futuro, los analistas de Goldman Sachs ven la política de la MAS sin cambios a lo largo de 2021, comentando: “De cara al futuro, con una holgura aún significativa en toda la economía que mantiene la inflación subyacente dentro de las zonas de confort de la MAS, no esperamos que la MAS haga ningún cambio en los parámetros de la banda de política NEER SGD (la pendiente, el punto medio o la anchura) este año. Sin embargo, la normalización de la actividad en los sectores orientados al consumidor, la fuerte demanda externa y el cierre de la brecha de producción podrían provocar mayores presiones sobre la inflación subyacente el próximo año, creando suficiente impulso para un cierto endurecimiento de la política en abril de 2022”, algo con lo que Irvin Seah, economista senior de DBS Bank, está de acuerdo en general, aunque señala con cautela: “La decisión política de octubre será más complicada. La MAS podría optar por adoptar un enfoque preventivo (es decir, si la inflación es motivo de preocupación) o adoptar una postura ligeramente pasiva y que la decisión se reafirme con datos potencialmente sólidos”. En pocas palabras, la decisión de octubre dependerá de los datos. Dependerá de la dinámica entre el crecimiento y la inflación, y se superpondrá con el riesgo que se avecina, no sólo interno sino también externo. En el lado opuesto a los datos macroeconómicos cada vez más alentadores, las nuevas variantes del virus, el rebrote de la pandemia y la lentitud en el despliegue de las vacunas en algunos países (incluidos los pares de la región) complican la ecuación política. La inflación es sólo una de las variables de esta ecuación”. La MAS celebra reuniones semestrales, y la próxima declaración de política monetaria está prevista para octubre de 2021.