Singapur: La MAS mantiene estable su política monetaria en la reunión de octubre
La Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) mantuvo sin cambios su política monetaria en el nivel fijado en su reunión anterior del 30 de marzo. De este modo, la MAS mantuvo la tasa objetivo de apreciación anual de la banda de política del tipo de cambio nominal efectivo del dólar de Singapur (S$NEER) en el cero por ciento, manteniendo de hecho su postura monetaria flexible. Además, no se modificó la amplitud de la banda de fluctuación. El dólar de Singapur se gestiona frente a una cesta de divisas y la Autoridad Monetaria de Singapur aplica un régimen de flotación controlada, en el que la moneda fluctúa dentro de una banda de fluctuación cuyo nivel y dirección son decididos por la Autoridad con el fin de hacer frente a la volatilidad a corto plazo de los mercados de divisas y garantizar la estabilidad de precios a medio plazo. La Autoridad renuncia así a su capacidad de controlar los tipos de interés nacionales, que en su lugar vienen determinados en gran medida por los tipos de interés de los préstamos internacionales y las expectativas de los futuros movimientos del dólar de Singapur. La decisión, ampliamente esperada por los analistas del mercado, fue impulsada por unas perspectivas de crecimiento prudentes para el resto de 2020 y unas expectativas de deflación continuadas. La Autoridad espera que la inflación subyacente -la variable clave que sigue- se sitúe entre menos 0,5% y 0,0% este año, ya que la moderación de la demanda, los bajos precios del petróleo y el debilitamiento del mercado laboral pesan sobre las presiones de los precios. Además, la MAS prevé una ralentización del crecimiento en el cuarto trimestre, tras la expansión trimestral del 7,9% registrada en el tercero, ya que la prolongación del brote vírico actúa como un viento en contra de la actividad, tanto en el interior como en el exterior. Por ello, la Autoridad consideró oportuno prolongar su orientación acomodaticia.
En su comunicado, la Autoridad no indicó explícitamente la dirección futura de la política, pero comentó que “como se espera que la inflación subyacente se mantenga baja, la MAS evalúa que una política acomodaticia seguirá siendo apropiada durante algún tiempo”. En este sentido, la decisión de la MAS pretende “complementar los esfuerzos de política fiscal para mitigar el impacto económico de la COVID-19 y garantizar la estabilidad de precios a medio plazo”. De cara al futuro, los analistas de Nomura consideran que la política de la MAS se mantendrá sin cambios a lo largo de 2021, y comentan: “Creemos que es demasiado pronto para posicionarse a favor de un endurecimiento de la MAS a través del S$NEER, ya que no vemos esto como un riesgo material hasta que nos acerquemos a 2022. Esto es algo con lo que los analistas de Goldman Sachs están de acuerdo en general, aunque señalan con cautela: “De cara al futuro, nuestro caso base es que no haya más cambios en la política del MAS en la segunda mitad del año [fiscal], ya que la política fiscal ha desempeñado y seguirá desempeñando el papel principal de amortiguar el impacto del coronavirus en la demanda del sector privado y los balances financieros. […] Sin embargo, dada la incertidumbre en torno a la trayectoria del virus, la evolución de las vacunas y el crecimiento mundial, si la profundidad y la duración de la recesión fueran mayores de lo que esperamos actualmente, ello podría crear riesgos de nuevos ajustes a la baja en el punto medio de la banda de política durante el próximo año” La MAS celebra reuniones semestrales, y la próxima declaración de política monetaria está prevista para abril de 2021.