Suecia: El PIB registra en el segundo trimestre su mayor contracción en un año
La segunda publicación de las cuentas nacionales mostró que la economía sueca se contrajo un 0,3% en términos intertrimestrales desestacionalizados en el segundo trimestre. El resultado fue superior a la estimación preliminar de un descenso secuencial del 0,8%, pero inferior a la expansión del 0,8% revisada al alza observada en el primer trimestre, y marcó el mínimo de un año. En términos anuales desestacionalizados, el crecimiento económico cobró impulso, acelerándose hasta el 0,6% en el segundo trimestre, tras el crecimiento del 0,5% del trimestre anterior.
El retroceso trimestral se debió en gran medida a la caída de las existencias, que restó 0,6 puntos porcentuales a la lectura, ya que tienden a ser volátiles y, por tanto, no son necesariamente representativas de la salud subyacente de la economía. En cuanto a otros componentes del gasto, la inversión fija se contrajo un 1,7% en el segundo trimestre (+0,2% intertrimestral en el primer trimestre), el peor resultado desde el primer trimestre de 2022. Además, el crecimiento del gasto público se redujo al 0,1% en el segundo trimestre (1T: +0,3% intertrimestral). Más positivamente, el consumo privado cayó a un ritmo más suave del 0,2% en el segundo trimestre, por encima de la contracción del 0,5% del primer trimestre. Pasando al sector exterior, las exportaciones de bienes y servicios repuntaron y aumentaron un 1,0% trimestral desestacionalizado en el segundo trimestre, en contraste con la contracción del 0,1% del primer trimestre. Por el contrario, las importaciones de bienes y servicios se deterioraron, contrayéndose un 0,6% en el segundo trimestre (T1: +0,6% intertrimestral). En consecuencia, el comercio neto contribuyó positivamente a la lectura global del PIB, añadiendo 0,9 puntos porcentuales.
Nuestros panelistas prevén un repunte de la economía en el tercer trimestre, con una modesta expansión del PIB en términos secuenciales en el 3T y un aumento de magnitud similar en el 4T. Debería producirse una recuperación continuada del poder adquisitivo, que viene produciéndose desde el tercer trimestre de 2023, cuando los aumentos salariales anuales superaron a la inflación por primera vez en más de dos años. Por otra parte, el goteo a través de la economía real del ciclo de relajación del Riksbank añadirá un nuevo impulso, en gran parte mediante la reducción de los pagos de hipotecas a tipo variable. La fortaleza de los principales mercados de exportación, como Alemania, es un factor a tener en cuenta.