Suecia: El Riksbank mantiene su política monetaria en la reunión de julio y mejora sus perspectivas de crecimiento para 2021
En su reunión del 1 de julio, el Riksbank mantuvo sin cambios su política monetaria, manteniendo el tipo repo en el 0,00% y prosiguiendo su programa de compra de activos. La decisión reflejaba unas expectativas de inflación moderadas -se prevé que la inflación se sitúe cerca de la tasa objetivo del Banco del 2% a largo plazo- y unas perspectivas económicas alentadoras para el segundo semestre de 2021. Así pues, el Banco sigue teniendo margen para mantener su orientación acomodaticia y proporcionar liquidez para impulsar la actividad. Con este fin, el Banco continuó con su programa de compra de activos -que se prolongará hasta finales de año-, manteniendo el importe nominal total en 700.000 millones de coronas suecas desde la reunión de abril. El Riksbank también actualizó sus previsiones de PIB e inflación para los próximos años. Las perspectivas de crecimiento del PIB se mejoraron hasta el 4,2% interanual en 2021, frente al 3,7% del informe de abril, mientras que la previsión para 2022 aumentó ligeramente hasta el 3,7% (informe de abril: +3,6% interanual). Por otra parte, también se revisaron al alza las expectativas de inflación con un tipo de interés fijo (CPIF): Ahora se sitúa en el 1,8% en 2021, frente al 1,5% del informe de abril, antes de reducirse al 1,7% en 2022 (informe de abril: 1,4%).
De cara al futuro, el Riksbank reiteró su postura moderada en su comunicado, afirmando que “se espera que el tipo repo se mantenga en el cero por ciento durante todo el periodo de previsión, que se extiende hasta el tercer trimestre de 2024”. Por ello, todos nuestros panelistas esperan que el Banco mantenga el tipo en el 0,00% durante el resto del año. Reflexionando sobre las perspectivas del tipo repo, Knut Hallberg, Cathrine Danin y Glenn Nielsen, analistas de Swedbank, comentaron: “No puede descartarse un recorte del tipo si el objetivo de inflación se ve amenazado en el futuro. Sin embargo, también está sobre la mesa una política monetaria menos expansiva en caso de que la presión inflacionista se sitúe persistentemente por encima del objetivo. En este sentido, el panorama de riesgos es algo más simétrico que antes. […] Se acerca el momento de aumentar los tipos. Aunque todavía no hemos llegado a ese punto, será un tema de debate en las próximas reuniones de política monetaria que se celebrarán en otoño (septiembre y noviembre)” El próximo anuncio de política monetaria se publicará el 21 de septiembre.