Uruguay: La economía registra en el último trimestre de 2022 la mayor contracción desde el primer trimestre de 2021
El PIB cayó un 0,1% interanual en el cuarto trimestre, lo que contrasta con la expansión del 3,4% observada en el tercer trimestre. La lectura del cuarto trimestre marcó el peor resultado desde el primer trimestre de 2021.
La caída se debió al debilitamiento del consumo privado, la inversión fija y las exportaciones. El consumo privado aumentó un 4,5% en el último trimestre, por debajo de la expansión del 7,3% del tercer trimestre, ya que la inflación se mantuvo obstinadamente alta. El consumo público cayó a un ritmo más lento del 0,2% en el cuarto trimestre (3T: -3,0% interanual). Mientras tanto, el crecimiento de la inversión fija cayó al 3,9% en el cuarto trimestre (3T: +9,0% interanual). Las exportaciones de bienes y servicios empeoraron, contrayéndose un 5,6% en el cuarto trimestre (3T: +13,6% interanual). Además, el crecimiento de las importaciones de bienes y servicios disminuyó al 3,7% en el cuarto trimestre (+16,8% interanual en el tercer trimestre), lo que supone el peor resultado desde el primer trimestre de 2021.
En cuanto al PIB por ramas de actividad, el retroceso del sector agrícola se intensificó notablemente debido a una grave sequía relacionada con el fenómeno de La Niña. Además, los sectores industrial y de servicios también se deterioraron. En términos intertrimestrales desestacionalizados, el PIB cayó un 1,3% en el cuarto trimestre, frente a la caída del 0,7% del trimestre anterior. La lectura del cuarto trimestre marcó la caída más pronunciada desde el estallido de la pandemia de Covid-19 en el segundo trimestre de 2020. El resultado situó el crecimiento global para 2022 en el 4,9%, por debajo del repunte del 5,3% registrado en 2021 tras la pandemia.
En cuanto al año en curso, el crecimiento económico anual se reducirá aproximadamente a la mitad. La actividad interna se verá afectada por el endurecimiento de las condiciones de financiación y una inflación aún elevada. Además, la actual sequía perjudicará al sector agrícola, mientras que la ralentización de la economía mundial hará mella en las exportaciones uruguayas. Por otro lado, la reducción de los impuestos sobre la renta y las pensiones proporcionará cierto apoyo al gasto privado. Entre los factores clave que habrá que vigilar figuran la evolución de la sequía, las negociaciones relativas a la adhesión al Acuerdo Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP) y las conversaciones comerciales bilaterales con China.