Venezuela: La inflación cae en mayo a su nivel más bajo en dos años, pero sigue por las nubes y se espera un repunte por la caída de Covid-19
En mayo, los precios nacionales al consumo aumentaron un 38,6% con respecto al mes anterior, lo que supone un incremento intermensual del 27,5% con respecto a abril y la cifra más alta en cuatro meses, según los datos publicados el 8 de junio por el Banco Central de Venezuela (BCV). La aceleración reflejó en gran medida el aumento más rápido de los precios de los equipos domésticos, los alimentos y los servicios de vivienda. Por otra parte, los precios de la ropa y el transporte crecieron a un ritmo más suave que el mes anterior. Mientras tanto, la inflación retrocedió a 2,297% en mayo (abril: 2,312%), marcando la impresión más baja desde marzo de 2018. La eliminación de los controles de precios el año pasado permitió al sector privado desempeñar un papel más importante en la importación y venta de bienes de consumo, reduciendo así las presiones sobre los precios. Esto, junto con una rápida dolarización de la economía, han ayudado a calmar un poco las presiones sobre los precios. Mientras tanto, la inflación media anual se situó en el 3,231%, por debajo del 3,759% de abril.
Sin embargo, se espera que la inflación se acelere en el futuro. Las presiones inflacionistas derivadas de una aguda escasez de gasolina se extenderán a otros sectores de la economía, mientras que la fuerte depreciación del bolívar provocará un mayor efecto de transmisión. Para controlar la inflación, el Gobierno reintrodujo el 24 de abril el control de precios de 27 productos alimenticios y aumentó el salario mínimo, las pensiones y los bonos de alimentación. Sin embargo, es probable que esta medida agrave la escasez y genere mercados paralelos.