Zona euro: La inflación baja en febrero
La inflación armonizada volvió a bajar en febrero, aunque menos de lo esperado por los mercados, situándose en el 8,5% frente al 8,6% de enero. Por tanto, se acercó algo más al objetivo del Banco Central Europeo del 2,0%.
El resultado de febrero se debió a un menor aumento de los precios de la energía. Sin embargo, los precios de los servicios, los alimentos, el alcohol y el tabaco y los bienes industriales no energéticos subieron a un ritmo más rápido. Por su parte, la tasa anual de inflación subyacente, que excluye la volatilidad de los precios de la energía y los alimentos no elaborados, subió al 7,4% en febrero, frente al 7,1% de enero, lo que supone la cifra más alta desde que se tienen registros. En términos mensuales, los precios de consumo armonizados subieron un 0,8% en febrero, frente a la caída del 0,2% de enero.
Al comentar las perspectivas, Bert Colijn, economista jefe de ING, declaró: “La lectura de febrero es un claro retroceso, pero los indicadores prospectivos muestran que la tendencia a la baja de la inflación va a continuar. Marzo mostrará una caída mucho más rápida de la inflación general, ya que el enorme salto del pasado marzo desaparecerá de la comparación interanual. La inflación de la energía se volverá negativa pronto, posiblemente ya en marzo. Pero la cuestión es a qué velocidad descenderán otras categorías de precios y si la inflación se mantiene más de lo previsto.”